Charla con Rodolfo Corazón

Anoche me acosté y sentí
como el corazón me tironeaba del pecho
se me hinchaba y pataleaba y no me dejaba dormir...
y es que él quería solo, salir corriendo a buscarte!
Hablé con él y le dije que no desesperara,
que era solo una ausencia pasajera...
suspiró... y me dijo que latía fuerte
y se expandía por todo el amor que lo habitaba,
que era grande y de fuego, que lo habia encontrado
y que no podian vivir uno sin el otro.
le dije que lo entendía y que yo sentía lo mismo que él,
que escuchaba con atención sus retumbes,
su cálido golpetear, su tranquilidad
sus timbales de pasión y sus ganas de volar
su presencia, sus llamados, su viva voz.
Le conté que sus alas hacian cosquillas en mi plexo
y que sentía sus impaciencias
y sus ganas de arrancarseme de un tirón...
él me dijo que eso era por poco entender de razones,
y yo me alegré, y le dije que era por ser un corazón de Verdad
...esa noche hablamos mi corazón y yo
y le pedí entonces, que nunca pero nunca jamás me dejara.